Hablamos de sus propiedades, para desintoxicarse, perder los kilos de más y prevenir afecciones como la hipertensión, los problemas digestivos, cardíacos y circulatorios, de la manera más natural posible.
Las uvas, un shock de energía.
Las uvas poseen propiedades muy saludables para prevenir y mejorar enfermedades reumáticas, malestares hepáticos, jaquecas e intoxicaciones.
Su riqueza se basa en los azúcares frutales que se absorben con facilidad en el aparato digestivo y que, al estar disueltos en agua, contienen sales minerales, vitaminas y ácidos, que aportan un verdadero efecto revitalizante.
Debido a los ácidos orgánicos, presentes en las uvas ( málico, cítrico y tartárico), su consumo, es beneficioso para quienes necesitan equilibrar la acidosis, que es una de las causas de la gota y de las afecciones reumáticas en general.
Además, las uvas, favorecen la eliminación de los cristales acumulados en las articulaciones, que causan determinados tipos de reumatismos.
Aún durante una dieta, y consumiéndolas moderadamente, son convenientes, por su acción depurativa, que consigue eliminar líquidos y acelerar el tracto intestinal.
Las manzanas, dosis de juventud.
Crudas o cocidas, con cáscara o peladas, las manzanas previenen un gran número de enfermedades que envejecen prematuramente.
Favorecen la digestión, el sistema nervioso, la circulación sanguínea y también fortifican los huesos y las articulaciones. también se ha comprobado que ayuda en la eliminación de los cálculos renales.
Como contienen azufre, resultan antitóxicas para el organismo y retrasan el envejecimiento; por eso, son ideales cuando la piel comienza a perder tonicidad, y las uñas y el pelo, su aspecto habitual.
En síntesis, las manzanas ayudan a prevenir las siguientes enfermedades:
* Diabetes: por su contenido de azúcares frutales y enzimas, que permite elevar considerablemente el umbral de tolerancia a la glucosa.
* Infarto: por su acción tónica del músculo cardíaco y su propiedad anticolesterol.
* Fatiga crónica: por su contenido de potasio, magnesio y fósforo.
* Enfermedades reumáticas y cálculos renales: evitan que se acumulen en las articulaciones, minerales no absorbidos o consumidos en exceso.
* Úlceras de estómago y de duodeno: por su efecto depurativo. También, los desequilibrios de la flora intestinal y las inflamaciones.
* Insomnio: por su contenido de fósforo y vitamina B2.
El limón, desintoxicante natural.
El limón, es una de las frutas con mayores componentes de vitamina C, y por ese motivo, los ácidos que contiene, poseen la ventaja de neutralizarse una vez que ingresan en el organismo, provocando una alcalinización de la sangre.
Esto aporta numerosos beneficios, ya que hay menos acumulación de cristales tóxicos, un mayor equilibrio de los minerales y un aumento de la resistencia a las enfermedades, como el cáncer, los problemas digestivos y el envejecimiento precoz.
El ácido cítrico tiene un alto poder desintoxicante y tónico del aparato digestivo; actúa como analgésico contra los dolores estomacales, normaliza los espasmos del piloro, fortalece la musculatura del estómago y limpia el hígado y el páncreas.
Para aprovechar mejor sus múltiples ventajas, conviene incluir el limón, en la rutina alimentaria.
Las naranjas, para aumentar las defensas.
Las naranjas contienen altas dosis de vitamina C, para servir de barrera, contra el avance de las bacterias. Su función principal, es la de levantar las defensas del organismo, que deriva en su protección, contra las enfermedades.
Además, desintoxican al organismo, de los contaminantes a los que está expuesto todos los días.
Como las naranjas contienen ácido cítrico, que tiene poder oxidante y depurativo, actúan como un excelente desinfectante y microbicida.
También actúan como analgésico contra los dolores estomacales, normalizan los espasmos en el píloro, fortifican los músculos del estómago, y tienen efectos de limpieza en el hígado y en el páncreas.
Por otra parte, poseen minerales que, al estar en perfecto equilibrio, ayudan a restablecer la salud.
El calcio, favorece el desarrollo de los huesos y los dientes, e interviene en el mantenimiento de la presión arterial estable. El fósforo, es ideal contra el estrés, las intoxicaciones y el nerviosismo. El hierro y el magnesio, fortalecen los músculos, y colaboran previniendo los efectos nocivos del cansancio.
El potasio y el sodio, son excelentes depurativos y disolventes de grasas, ya que estimulan la producción de jugos digestivos y el deshecho de ácido úrico.
En cuanto a la presencia de vitamina C, ésta también contribuye a mantener la belleza del cuerpo. Por su acción fortalecedora de los capilares sanguíneos, previene la aparición de hemorragias y várices.
Tiene una importante función en la elaboración del colágeno, que es el tejido de sostén de la piel, manteniéndola tersa y jóven.
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