El mantenernos jóvenes y además felices, es algo que demasiadas personas entienden como un ideal, bastante lejos de los que ellas creen que pueden lograr.
Sin embargo, no es tan así. Como casi todo en la vida, depende de nuestra actitud, de nuestro punto de vista ante la vida, los acontecimientos, y fundamentalmente, en cómo nos percibimos a nosotros mismos.
Es mucho lo que podemos hacer, en pro de nuestro bienestar integral. Y no necesariamente, tenemos que empezar por grandes cambios. Te sorprenderás de ver, cómo las pequeñas variaciones de enfoque, percepción y pensamiento, nos regalan importantes resultados, en mejoras sistemáticas de nuestro ánimo, generación de alegría y creación de nuevos sucesos que nos hacen cada vez, sentirnos mejor.
Vale la pena hacer lo necesario, por sentirnos bien, física y anímicamente, por nosotros mismos y por quienes nos rodean. Comienzas ahora?
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Gracias por visitar mi blog.
Olga Elisabeth Sosa.
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